domingo, 6 de junio de 2010

CONCLUSION

En la elaboración de este trabajo sobre la niñez temprana que como ya sabemos va desde los tres a los seis años de edad, conocimos aspectos de gran interés acerca de las teorías de Jean Piaget. Para nosotras como futuras docentes, el tema es de gran ayuda ya que nos permitió entender cómo funciona el desarrollo cognitivo de la niñez temprana.

En la niñez temprana ocurren cambios importantes para el desarrollo de la personalidad del hombre y se producen en ella, tres logros a destacar: dominio y perfeccionamiento de la actividad con los objetos, del lenguaje y de la marcha. Esta etapa constituye el período sensitivo del desarrollo del lenguaje, es decir, es el momento donde se aprende con más facilidad y rapidez la lengua materna.

Surge la llamada “crisis de los tres años” porque es un período en el que el niño/a desea ejecutar otras acciones más complejas e independientes para parecerse a los adultos y éstos lo limitan y tratan de mantenerlo en actividades de un pequeño/a menor. Entonces, se rebela y el adulto tiene dificultades ante su obstinación y negativismo que, exhibe contra él, ya que lo/a cuida constantemente y sobreprotege.

Vimos la gran velocidad con la que aprenden palabras nuevas se debe a que asimilan el significado de una palabra al escucharla solamente una o dos veces durante la conversación a esto se le denomina representación rápida. Así como también la memoria sobre sus experiencias ya que simplemente recuerdan los eventos que les causaron una fuerte impresión y la mayoría de esos primeros recuerdos son permanentes.

Tipos de memoria

Memoria genérica


Comienza alrededor de los dos años y describe el perfil general de un hecho familiar que ocurre de manera repetida, como subirse a un autobús para ir al colegio o lo que se toma habitualmente para desayunar.

Memoria episódica

Se refiere a algo que sucedió una vez en un momento específico, como una visita al zoológico. Este tipo de recuerdos existe incluso a los dos años de edad, pero persiste solo durante unas pocas horas, semanas o meses y luego se pierde.

Memoria autobiográfica

Es un tipo de memoria episódica, pero hace referencia a recuerdos que tienen un significado personal y forman parte de la vida de una persona. Suele comenzar en la niñez temprana, pero rara vez antes de los tres años. Aumenta lentamente entre los cinco y los ocho años y con frecuencia estos recuerdos permanecen hasta 20, 40 años, o más. Solo aquellos recuerdos que adquieren un significado especial y personal forman parte de este tipo de memoria.

La memoria autobiográfica tiene una función social, pues permite que compartamos con los demás algo de nosotros mismos. Además, es la base para los relatos, canciones, épica, historia y mitos de todas las culturas.

Factores que influyen en la memoria de los niños

Lenguaje. El desarrollo del lenguaje es necesario para poder retener y recuperar recuerdos duraderos. Cuando los niños pueden expresar sus recuerdos con palabras, es cuando pueden retenerlos en la mente.

Los niños recuerdan mas detalles cuando sus padres o madres utilizan un estilo en el que estructuran una conversación añadiendo más información y refiriéndose a un nuevo aspecto del suceso que comentan.

Inteligencia: enfoques psicométricos vygostkiano.

Un factor que afecta la prontitud con que los niños desarrollan el lenguaje y la memoria es la inteligencia. Hay dos formas en que se mide la inteligencia en la niñez temprana, a través de pruebas psicométricas tradicionales y mediante pruebas más recientes de potencial cognoscitivo.

Escala de inteligencia de Stanford-Binet. Pruebas individual de inteligencia para medir memoria, orientación espacial y juicio práctico. Se aplica de entre 30 a 40 minutos. Se pide al niño que defina palabras, ensarte cuentas, construya con cubos entre otras.

Influencia sobre la inteligencia media

Tipos de Inteligencia.

Inteligencia Musical: Los niños que la evidencian se sienten atraídos por los sonidos de la naturaleza y por todo tipo de melodías. Disfrutan siguiendo el compás con el pie, golpeando o sacudiendo algún objeto rítmicamente.

Inteligencia Corporal: cinestésica: Se la aprecia en los niños que se destacan en actividades deportivas, danza, expresión corporal y / o en trabajos de construcciones utilizando diversos materiales concretos. También en aquellos que son hábiles en la ejecución de instrumentos.

Inteligencia Lingüística: Está en los niños a los que les encanta redactar historias, leer, jugar con rimas, trabalenguas y en los que aprenden con facilidad otros idiomas.

I

nteligencia Lógico-matemática: Los niños que la han desarrollado analizan con facilidad planteos y problemas. Se acercan a los cálculos numéricos, estadísticas y presupuestos con entusiasmo.

Inteligencia Espacial: Está en los niños que estudian mejor con gráficos, esquemas, cuadros. Les gusta hacer mapas conceptuales y mentales. Entienden muy bien planos y croquis.

Inteligencia Interpersonal: La tienen los niños que disfrutan trabajando en grupo, que son convincentes en sus negociaciones con pares y mayores, que entienden al compañero.


Educación en la niñez temprana


Asistir a un centro de preescolar puede ser de gran utilidad para un niño. En estos centros los niños exploran un mundo diferente al de casa y pueden elegir ente actividades que se ajustan a sus capacidades y sus gustos. A través de esas actividades experimentan el éxito que les da confianza y autoestima.


Un buen centro de preescolar aporta a los niños experiencias que les permiten aprender haciendo cosas y divirtiéndose, estimula sus sentidos a través del arte, la música y materiales manejables como pintura, arcilla, madera, etc. y los anima a hablar, crear y resolver problemas. Estas actividades son la base del funcionamiento intelectual avanzado.


Por tanto, un centro de preescolar debe ser un lugar que el niño considere divertido y agradable, pues de ese modo aprende a ver el aprendizaje y la escuela de un modo positivo, y aprende a considerarse capaz y competente, al verse expuesto a la realización de actividades en las que tiene éxito.


Muchos niños de 5 años de edad y más pequeños se les puede enseñar que dos y dos son cuatro, o que a niños de nueve meses se les puede enseñar a reconocer palabras impresas en tarjetas brillantes, pero a menos que la motivación para hacer esto surja de ellos o que este tipo de aprendizaje surja de forma natural de su experiencia, lo mejor que puede hacer un niño de esta edad es jugar, que es lo verdaderamente importante a esta edad para su desarrollo.

Desarrollo retardado del lenguaje

La comunicación oral constituye un aspecto esencial para el desarrollo integral del niño, a ella se vincula, en gran medida, el desarrollo del pensamiento, la memoria, la imaginación, la capacidad de aprender, de conocer el medio que le rodea y de aprender a transformarlo.

El tres por ciento de los preescolares presentan retardo en el lenguaje, aunque su inteligencia corresponde a un nivel promedio o superior. Los niños son más propensos que las niñas al hablar tardíamente. No está claro por qué algunos niños se demoran en hablar. Y no es necesariamente porque carecen de estimulación lingüística en el hogar. Esos niños pueden tener una limitación cognoscitiva que les dificulte aprender las reglas del lenguaje

Algunas investigaciones actuales buscan problemas en la representación rápida. Los niños con demoras en las habilidades del lenguaje necesitan escuchar una palabra nueva más a menudo que otros niños antes de poder incorporarla en su vocabulario. La herencia juega un papel en los casos más severos de retardo del lenguaje.

Muchos niños que hablan tarde, en especial quienes tienen comprensión normal, a la largan igualan a los demás. Por esta razón, el desarrollo retardado del lenguaje puede tener consecuencias cognoscitivas, sociales y emocionales de largo alcance. Los niños que muestran una tendencia inusual a pronunciar mal las palabras a los 2 años, que tienen un vocabulario limitado a los 3, tienen problemas para nombrar objetos a los 5, más adelante pueden tener dificultades para la lectura. Los niños que no hablan tienden a recibir juicios negativos de los adultos y de otros niños y a tener problemas para encontrar compañeros de de juegos o amigos. Los niños considerados como no inteligentes o inmaduros pueden apropiarse de esas expectativas y su autoimagen puede verse lastimada.

La terapia del habla y del lenguaje para los niños con un desarrollo retardado del lenguaje debería empezar con la evaluación profesional del niño y su familia. En una técnica llamada “lectura de dialogo”, la lectura de libros con ilustraciones se convierte en un verdadero vehículo para el dialogo entre padre e hijo acerca de la historia. Niños de 3 a 6 años con demoras del lenguaje leve a moderadas, cuyas madres fueron entrenadas en la lectura de diálogo mejoraron más que un grupo de comparación cuyas madres fueron entrenadas para usar principios similares al hablar con sus hijos pero no acerca de libros.

Desarrollo de la memoria

A menudo la memoria es comparada con un sistema de archivo que tiene tres pasos o procesos: codificación, almacenamiento y recuperación. La codificación: es el proceso de preparación para el almacenamiento, para ser más fácil de encontrarla cuando se necesite. El almacenamiento guarda la información para usarla en el futuro. La recuperación, ocurre cuando se tiene acceso a la información o se recupera del almacenamiento en la memoria.

Durante la niñez temprana, los niños muestran un desarrollo significativo de su memoria. Tanto en los niños de esta edad como en los adultos existe una diferencia entre el reconocimiento y el recuerdo. El reconocimiento es la capacidad para identificar algo ya conocido y que vuelve a verse (por ejemplo, distinguir entre un grupo de imágenes cuáles se había visto antes).

Reconocimiento y recuerdo

Reconocimiento: es la habilidad para identificar algo que se ha encontrado antes. El recuerdo: es la capacidad para evocar el conocimiento de algo que está en la memoria, como describir una imagen que ya se ha visto antes sin que esté presente en ese momento. A cualquier edad resulta más fácil reconocer que recordar.

Cuanto más familiarizados estén los niños con los objetos, mejor pueden recordarlos. También pueden recordar mejor el material cuando los objetos parecen tener una relación entre sí. Por ejemplo, una mesa y una silla.

Los niños recuerdan mejor cuando están motivados para dominar destrezas en general. La motivación hacia la destreza hace referencia a la tendencia de un niño a ser independiente, utilizar estrategias para resolver problemas y tratar de realizar tareas difíciles.

En una investigación en la que se observó lo que los niños hacían con diversos juguetes, se vio que los niños que utilizan determinados objetos tienen más probabilidad de recordarlos. Por ejemplo, los niños que dieron un nombre, agruparon o dedicaron tiempo a pensar o repetir los nombres de los juguetes (es decir, utilizaron estrategias para ayudarse a recordar) recordaron mejor que quienes hicieron menos de estas actividades. La memoria prospectiva: es la habilidad para recordar que debe hacer algo en un momento posterior como por ejemplo llevar un libro a la escuela.

Formación de los recuerdos de la niñez

La memoria sobre experiencia de la niñez temprana rara vez es deliberada: los niños pequeños simplemente recuerdan los eventos que les causaron una fuerte impresión y la mayoría de esos primeros recuerdos son permanentes.

Es probable que el recuerdo más antiguo que tenga una persona sea de algo que ocurrió cuando tenía al menos tres años de edad. No obstante, aunque algunas personas tienen recuerdos vívidos desde los tres años, otras no recuerdan nada anterior a los ocho años. En la niñez temprana, los niños no tratan de memorizar a propósito, pero recuerdan sucesos que les causaron una impresión particular. La mayor parte de los recuerdos son de corta duración y no suelen recordarse en etapas posteriores de la vida.

Compañeros imaginarios:

Los niños que tienen compañeros imaginarios pueden distinguir la fantasía de la realidad. Los compañeros imaginarios pueden ser de distinta naturaleza, como personas u objetos, peluches, monos o personajes inventados. Y es con ellos con quienes el niño tiene un espacio para conversar, jugar y pelear.

En general, se supone que los compañeros imaginarios tienen una función positiva para los niños en momentos en que ellos no son capaces de expresar bien sus sentimientos. Incluso hay ocasiones en que sus propios sentimientos negativos se los atribuyen a ellos. Por ejemplo, para evitar un reto o castigo cuando el niño hace algo malo culpa.

Los compañeros imaginarios también surgen como respuesta a las idealizaciones e ideas positivas. Junto a estos personajes tienen espacio para satisfacer sus anhelos y deseos, en general, en esas instancias pueden satisfacer algunas necesidades que no tienen en su entorno habitual.

La teoría de Piaget mantiene que los niños pasan a través de etapas específicas conforme su intelecto y capacidad para percibir las relaciones maduran.

El desarrollo del lenguaje

Los niños pequeños hacen preguntas constantemente sobre cualquier cosa, en parte porque desean aprender cosas y en parte porque han aprendido que sus preguntas pueden iniciar una conversación.

Cuando los niños superan la edad de tres años, su lenguaje se parece cada vez más al del adulto puede usar de 900 a 1000 palabras diferentes y emplea alrededor de 12,000 cada día. Entre los tres y lo seis años los niños suelen aprender un promedio de nueve palabras nuevas por día, aunque no siempre las utilizan como los adultos. Por ejemplo, un niño puede usar la palabra ayer para referirse a cualquier momento del pasado y mañana para cualquier tiempo futuro.

La gran velocidad con la que aprenden palabras nuevas se debe a que asimilan el significado de una palabra al escucharla solamente una o dos veces durante la conversación a esto se le denomina representación rápida.

Al comienzo de la niñez temprana, los niños pueden seguir instrucciones que incluyen más de un paso, como: "recoge tus juguetes y guárdalos en el arcón", pero a menudo malinterpretan las oraciones complejas. Por ejemplo, si le dices "puedes ver la televisión después de ordenar tu cuarto", el niño puede procesar las palabras en el orden en que las escuchó y creer que puede ver primero la televisión y después ordenar su cuarto.

Los niños de 3 y 4 años tienen capacidad para decir cuando dos palabras, como “perrito y cachorrito”, se refieren al mismo objeto o acción. Saben que un solo objeto no puede tener dos nombres. También saben que es posible aplicar al mismo sustantivo más de un adjetivo, por ejemplo “Fido es manchado y peludo”.

Los niños pequeños suelen ser también muy literales para interpretar el significado de las palabras y no es raro que perciban un significado muy diferente al que los adultos intentar comunicar. Por este motivo hay que prestar atención a lo que se le dice a los niños, sobre todo en momentos de ira.

Gramática y sintaxis

Las formas en que los niños combinan sílabas en palabras y palabras en oraciones cada vez son más sofisticadas durante la niñez temprana. A menudo omiten palabras como un y la, pero incluyen algunos pronombres, adjetivos y preposiciones. Las mayoría de sus oraciones son declarativas, por ejemplo “Gatito quiere leche”, pero pueden hacer y responder preguntas que inician con qué y dónde, las que inician con por qué y cómo son más difíciles de entender.

Los niños de esta edad son todavía tienden a cometer errores de sobrerregularizacion porque aún no han aprendido las excepciones a las regla. Decir “cabo” en lugar de “quepo” es un signo normal de progreso lingüístico. Entre las edades de 4 y 5 años las oraciones tienen un promedio de cuatro a cinco palabras y pueden ser declarativas, negativas por ejemplo “no tengo hambre”, interrogativas “¿Por qué no puedo salir?”, o imperativas “¡Atrapa la pelota!”. Los niños de 4 años usan con más frecuencia oraciones complejas con múltiples clausulas “Estoy comiendo porque tengo hambre”, si sus padres usan a menudo tales oraciones.

Entre los 5 y 7 el habla de los niños se ha hecho cada vez más adulta, ya que hablan en oraciones más largas y complicadas, así como también oraciones compuestas y complejas, usan más preposiciones y artículos y pueden manejar todas las partes del habla.

Pragmática y habla social

Cuando los niños aprenden el vocabulario, la gramática y la sintaxis son mas practico al usar el conocimiento del lenguaje para comunicarse. El habla social tiene la intención de ser entendida por un escucha, es decir, con una mejor pronunciación y manejo gramatical, es más fácil para los demás entender lo que dicen los niños.

El habla privada

Hablar en vos alta con uno mismo sin intención de comunicarse con otros, es normal y común en la niñez, y se presenta entre 20 y 50 por ciento de lo que dicen los niños de 4 a 10 años. Según Berk, los niños de 2 a 3 años se involucran en una “charla de cuna”, jugando con los sonidos y las palabras. Los niños de 4 a 5 años usan el habla privada como una forma de expresar fantasías y emociones. Los niños mayores “piensan en voz alta” o murmuran en tonos apenas audibles.

Una niña llamada Anna, de 4 años, estaba en su cuarto pintando. Cuando termino le escucho decir en voz alta “Ahora tengo que poner las pinturas en algún lugar para que se sequen. Las pondré en la ventana. Tienen que secarse ahora. Pintaré mas dinosaurios”.

Piaget consideraba el habla privada como un signo de inmadurez cognoscitiva. Según él, los niños pequeños son egocéntricos, incapaces de reconocer los puntos de vista de otros y por tanto incapaces de comunicarse significativamente. En lugar de ello, simplemente vocaliza cualquier cosa que pase por su mente.

Las investigaciones respaldan a Vigotsky en cuanto a la función del habla privada. En un estudio observacional de 93 niños de 3 a 5 años, 86 por ciento de sus comentarios no fueron egocéntricos. Según Berk, los niños mas sociables, y los que manejaban mas habla social, tendían a usar también el habla privada, respaldando la opinión de Vigotsky de que el manejo del habla privada es estimulado por la experiencia social.

Habilidad para clasificar

Al inicio del segundo año de vida, los niños son más lógicos para organizar objetos, personas y sucesos. Muchos niños de cuatro años de edad pueden clasificar los juguetes en función de su forma, color o clase. Además, suelen categorizar a las personas como buenas o malas, amigos o no amigos. Los niños organizan objetos, persona y eventos en categorías significativas. Clasificación de números. Los niños pueden contar y manejar cantidades y reconocer:

· El principio1-a1:

· El principio de orden estales:

· El principio de irrelevancia de orden:

· El principio de cordialidad:

· El principio de abstracción:

Aspectos inmaduros del pensamiento pre operacional

De acuerdo con Piaget una de las características principales del pensamiento pre operacional son las siguientes: Centración: es cuando los niños tienen a concentrarse en un aspecto de la situación descuidando los restantes. Pueden centrarse en un aspecto de la situación pero no en otros, llegando a menudo a conclusiones ilógicas. Por ejemplo, cuando ven dos vasos iguales llenos de agua dicen que los dos vasos tienen la misma cantidad de agua, pero si se vierte delante de ellos el agua de uno de esos vasos en otro más delgado y alto, dicen que este vaso tiene más agua. O bien, si le das a un niño una galleta partida por la mitad, en vez de dársela entera, puede pensar que le estás dando menos, debido a que cada mitad es más pequeña que toda la galleta. Descentrar: Es pensar en varios aspectos de una situación. Conservación: Termino de Piaget para la conciencia de que dos objetos que son iguales de acuerdo con cierta medida permanecen iguales ante la alteración.

Irreversibilidad: Los niños no entienden que algunas operaciones o acciones pueden ser revertidas estableciendo la situación origina. Consiste en que no entienden que una operación o acción puede realizarse en dos o más formas. Por ejemplo, no entienden que las dos mitades de la galleta puedan ponerse una junto a otra para formar una galleta entera.

Énfasis en los estados más que en las transformaciones:

Los niños no entiende el significado de las transformación entre estado. Los niños en esta etapa suelen pensar como si estuvieran viendo una película con una serie de fotograma estático. Así, no entienden que la transformación del líquido (pasarlo de un vaso a otro) no cambia la cantidad.

Razonamiento trasductismos:

Los niños usan el razonamiento trasductismos deductivo o inductivo. El razonamiento lógico puede ser de dos tipos: deducción e inducción. Los niños de esta edad, sin embargo, no piensan de este modo, sino que usan un pensamiento transductivo: toman una situación particular como base de otra situación particular, sin tener en cuenta lo general. Por ejemplo, podrían pensar: "He tenido malos pensamientos sobre mis padres. Mis padres se han divorciado. Por tanto, yo soy el causante del divorcio de mis padres".

Egocentrismo: Los niños asumen que todos piensas perciben y siente igual que ellos. Es la incapacidad para ver las cosas desde el punto de vista de otra persona. Es decir, no se trata de egoísmo, sino de un entendimiento centrado en ellos mismos. Se centran tanto en sus propios puntos de vista que no pueden considerar los de otra persona.

A esta edad, los niños no son tan egocéntricos como los recién nacidos, que no pueden distinguir entre su propio cuerpo y el universo, pero aún así piensan en el universo con ellos como su centro. Por ejemplo, cuando un niño cree que con sus malos pensamientos ha causado el divorcio de sus padres está pensando de manera egocéntrica.

Animismo: Los niños atribuyen vida a los objetos que no la tiene. Es una manifestación del pensamiento egocéntrico con el que los niños del periodo preoperatorio dotan de vida, e incluso de cualidades humanas, a los objetos del mundo material.

Capacidad para distinguir la apariencia de la realidad

Confunde lo que es real con la apariencia exterior. Los niños en la etapa de la niñez temprana tienen problemas para distinguir entre lo que las cosas parecen ser y lo que son en realidad. A menudo, los padres piensan que los niños les están mintiendo cuando lo que sucede es que no han establecido esta diferencia. Así, si una sombra en una habitación en penumbra parece algo amenazante, entonces cree que puede serlo. Y por mucho que los padres enciendan la luz y el niño vea que esa sombra no le hace nada (o que es solo una chaqueta en una percha) al volver a apagar la luz y volver a parecer amenazante (como un monstruo), seguirá teniendo miedo.

Desarrollo cognoscitivo

El enfoque piagetiano: El niño pre operacional.

Piaget denomino a la niñez temprana desde los 2 a los 7 años de edad. La etapa pre operacional porque los niños todavía no están listos para realizar manipulaciones mentales requiere el pasamiento lógico.

Jean Piaget estudió el pensamiento en la niñez temprana y le dio el nombre de etapa pre- operacional. En esta etapa se desarrolla la función simbólica. Es decir, la capacidad para utilizar símbolos para representar cosas. Un niño en esta etapa puede decir que quiere un helado aunque no haya visto ninguno en ese momento. Ya no necesita claves sensoriales para pensar el algo. Tiene una representación mental del helado que puede recordar y buscarlo.

Un símbolo es una representación mental a la que una persona le asigna un significado. El símbolo más común es la palabra hablada o escrita. Ahora los niños pueden aprender no solo mediante los sentidos y la acción sino también mediante el pensamiento simbólico

Avances del pensamiento pre operacional

Los progresos en el pensamiento simbólico son acompañados por una comprensión crecientes del espacio casualidad, identidades categorización y números. El uso simbólico: en esta los niños ya no necesita estar en contacto con un objeto, persona o evento para pensar en el.

Comprensión de identidades


Los niños se percatan de que las alteraciones superficiales no cambian las naturalezas de las cosas. Los niños desarrollan el concepto de que ciertas cosas son las mismas aunque puedan cambiar de forma, tamaño o aspecto. Son conscientes de que las alteraciones superficiales no cambian las cosas. Por ejemplo, Julia hablaba de ponerle un traje de pájaro a su gata, pero sabía que aunque se vistiera de pájaro seguiría siendo su gata.


Comprensión de causa y efecto


Los niños se dan cuenta de que los eventos tienen causas. Comprenden que una cosa causa otra y que pueden hacer que sucedan cosas. Las interminables preguntas de "por qué" indican su deseo de conocer las causas de las cosas.


Empatía: ponerse en el lugar de otro. Aunque Piaget pensó que la empatía se presenta más adelante, los niños más pequeños parecen mostrarla. Por ejemplo, a los 10-12 meses los bebés lloran cuando ven a otro bebé llorar. Hacia los 13 o 14 meses le dan palmaditas o le abrazan; a los 18 meses pueden darle un juguete nuevo para reemplazar a otro que se ha roto. No obstante, al principio de la niñez temprana le empatía se manifiesta cada vez más.


Los niños criados en familias donde se habla con frecuencia de los sentimientos y la causalidad logran la empatía a una edad más temprana que los niños de familias que no hablan de estos temas.

SALUD Y SEGURIDAD

SALUD Y SEGURIDAD





Debido al uso de las vacunas, muchas de las enfermedades que afectaban a los niños son ahora raras, y los accidentes constituyen hoy en día la principal amenaza.


En cambio, las enfermedades menores suelen ser parte de la niñez. Tos, estornudos, dolor de estómago y nariz tapada son síntomas que podemos observar con frecuencia en los niños. Suelen durar entre 2 y 14 días y rara vez requieren atención médica. Son enfermedades que ayudan a los niños a lograr la inmunidad ante enfermedades más graves y por eso conviene dejar que sigan su curso sin intervenir a no ser que sea absolutamente necesario.


Los problemas respiratorios son comunes en la niñez. Entre los tres y los cinco años de edad, los niños suelen tener de siete a ocho resfriados al año. Más adelante, durante la niñez intermedia padecen menos de seis resfriados al año. El número es menor debido al desarrollo del sistema respiratorio y el sistema inmunitario.



Los accidentes son muy comunes a estas edades. En promedio, los niños se lastiman una vez cada tres horas: cuando juegan con otros niños, cuando corren o saltan, cuando se caen, etc. La mayor parte de estos golpes no son graves y se olvidan con facilidad.


Los accidentes son la principal causa de muerte en la niñez, sobre todo los accidentes de tráfico. Los niños que no están protegidos en sillas adecuadas en los automóviles tienen 11 veces más probabilidad de morir en un accidente. Sin embargo, los niños inquietos a menudo se rebelan y se niegan a usar los cinturones de seguridad y los padres aceptan esta negativa sin insistir. Un estudio realizado en Australia encontró que educar a los niños de preescolar sobre la importancia de usar los cinturones de seguridad tenía mejores resultados que multar a los padres.

HABILIDADES MOTORAS

Las habilidades motoras finas, como abotonar una camisa y dibujar, involucran coordinación ojo-mano y músculo pequeños.

Capacidad para dibujar un círculo si se lo solicita, a los 3 años

  • Utilizar tijeras de punta roma para niños
  • Capacidad para dibujar un cuadrado y un triángulo a la edad de 4 años
  • Progresar con el uso de las tijeras hasta cortar en línea recta
  • Capacidad de ponerse la ropa correctamente
  • Manejar bien la cuchara y el tenedor al comer
  • Capacidad para montar rompecabezas
  • Capacidad para jugar con barro o plastilina.
  • Tienen la capacidad de manipular objetos pequeños.
  • Capacidad para dibujar un triángulo.

Muchos niños experimentan dificultades con las habilidades motoras finas, la principal razón es simplemente que aún no han desarrollado el control muscular, la paciencia y el razonamiento necesarios, en parte porque todavía no se ha completado la mielinización del sistema nerviosa central. Muchas habilidades motoras finas comprometen las dos manos y por lo tanto los dos lados del cerebro. Si una mano no sabe lo que la otra está haciendo es porque el cuerpo calloso y la corteza prefrontal todavía están inmaduros, los cordones se llenan de nudos, las hijas de papel se rompen, las cremalleras se traban, etc.

Para unos niños, a la inmadurez neurológica se le añaden unos dedos cortos y gruesos. A menos que los cuidadores tengan presentes estas limitaciones cuando seleccionan utensilios, juguetes y ropas, la frustración y la destrucción serán inevitables. Los preescolares suelen romper a llorar cuando no pueden atarse las botas, si no logran encajar una pieza en el rompecabezas, etc. Por fortuna, etas frustraciones van desapareciendo a medida que el niño va ejercitando las habilidades motoras finas hasta que logra dominarlas.

La distinción entre las habilidades motoras gruesas y las habilidades motoras finas, no significa que trabajen por separado, ya que todas estas habilidades se apoyan una sobre la otra, con las habilidades motoras gruesas que estimulan las habilidades motoras finas y viceversa. La teoría de los sistemas dinámicos: paulatinamente los bebés logran mayor control sobre los movimientos simples y luego integran estas habilidades en sistemas coordinados cada vez más complejos. A pesar de su capacidad para combinar actividades motoras simples en secuencias cada vez más complejas. Estas habilidades surgen más adelante, a medida que sus músculos maduran y los niños incrementan su capacidad para aprovechar la información visual para coordinar sus acciones.

A medida que los niños en edad preescolar se desarrollan en ambos tipos de habilidades motoras, combinan continuamente las habilidades que ya poseen con las que están por adquiriendo para producir capacidades mas complejas. Dichas combinaciones de habilidades se conocen como sistema de acción.

  • Desarrollo artístico:

Los dibujos iniciales reflejan la madurez del cerebro y son similares en niños de diferentes naciones y culturas.

La etapa de los garabatos. Surge a los dos años de edad y los adultos suelen pensar que estos garabatos son aleatorios y sin sentido. No obstante, los niños se interesan principalmente por la colocación de los trazos en el papel. Kellogg ha identificado 20 trazos básicos (como líneas o zigzags) y ha identificado 17 patrones de ubicación de los trazos en el papel que aparecen hacia los dos años de edad.


La etapa de la forma surge hacia los tres años. Los niños dibujan diagramas con seis formas básicas: círculos, cuadrados o rectángulos, triángulos, cruces, letras X y formas desiguales.


En la etapa de diseño, que alcanzan con rapidez desde la etapa anterior, los niños mezclan dos formas básicas en un patrón complejo. Se trata de dibujos abstractos. Los adultos suelen desechar y no valorar estos dibujos porque no son dibujos de algo concreto (como un árbol o una casa). Sin embargo, los adultos que empujan a los niños a dibujar objetos de la vida real están perjudicando el desarrollo artístico del niño.


La etapa pictórica comienza entre los cuatro y cinco años. Los niños empiezan a dibujar cosas de la vida real. Este paso del dibujo abstracto al dibujo representacional marca un cambio fundamental en el propósito del dibujo de los niños. Los elementos primarios en el arte consisten en un interés por la forma y el diseño, que es precisamente lo que caracteriza el dibujo de los niños en las primeras etapas. Pero después de los primeros años de escuela, cuando los adultos los presionan para pintar la realidad, sucede este cambio de lo abstracto a lo representacional y es cuando muchos niños que antes se divertían dibujando, pierden el interés artístico que tenían en un principio.